La caminante

Souvenirs

Una ardilla roja cruza la yerba muy temprano y yo tomo café sola. Las luces azules de Bourges. Las catedrales góticas y los bosques, góticos también. Esta cocina me gusta, quiero estar aquí. La manera en que Laura se agarra a mi brazo. Esas concupiscentes boulangeries francesas. Una gasolinera, otra gasolinera y otra.. Esther descalza en Páris.
Pablo y David en el coche, mil maneras de olvidar a un chulo. ¿Cuántas?.
Montañas rusas psicodélicas. El lúcido silencio de Dioni. Las compras abstractas en el Champion; (espagnoles , agggggg). La gallette complete camino del Monte de Saint Michel. La tortilla de atrezzo de la Mêre Poulard. Un mensaje en el móvil: el Sevilla le ha ganado la ida al Madrid, Arrive ma Seville!!. Otra gasolinera. Una tarde de Calvado y lluvia. Adan cantando por el Arrebato. Mi hija durmiendo en el coche. Las velas que enciendo en las catedrales. El café-tabac de la Rue Dante donde miro pasar la gente y tomo café . Je ne sais pas parler français. How is so beautiful woman alone?. Cualquier idioma sirve para preguntar pamplinas. Je ne suis pas seule, monsieur. (Le hablo en francés y no hay nadie más; espagnolas mentigosas agggggg). Una gasolinera. Miguel elige un árbol para que yo lo abrace (al árbol). La cerveza Leffe en Buchy, en el bar de la lotería que no jugamos ni Richard ni Esther ni Dani ni yo. La cocina que me gusta tanto donde Richard y yo bailamos como locas y Laura se muere de risa. La contundente alegría de la cuñá. El vecino conde que nunca ví, El Sena en Rouen. El borgoña que escogió Juanjo. El jardín de noche lleno de sombras. ¡Dios mío, que me asusto! ¿Qué es eso? ¿Quién hay ahí? Pasa tu primero, Pablo. Juaaaaaas! . Los mapas que no veo sin gafas. La deliciosa manera con la que Dani le da propina a la camarera en Issoire.
Los chistes de carretera, (palometa con queso fresco, aggggggg) El código Bourjois. Otro peaje y otra gasolinera. Los signos jacobeos de Bourges ,Chartres y Rouen , esas conchas y esas flechas que al parecer sólo vemos los peregrinos. Pasear por Honfleur. La cripta románica donde me quedé a solas. El puente de la Muette. (No estoy preparado para atravesar el puente de la Muette, juaaaassss) Los crípticos monólogos de Isaac que sólo entiende Sonia. Los museos pagados y cerrados (“desolé”). Sándwich de tapenade con queso feta y crudités en una gasolinera. Las casas que parecen acuarelas y las flores por todas partes. Franceses que beben a horas extrañas. Españoles que beben a cualquier hora. La paciencia de Jose. El Dalai Lama sonriendo desde la mesa de la cocina. Los enanos mentirosos que destruyen las minas.
La discreta alegría del otro David. El universal murmullo de los árboles. Los vídeos sin sentido. Servidora haciendo de proxeneta a los pies de una abadía. La espuma de la marea que sube de repente. El barrio árabe al salir de París. “¿Cuándo vuelves? “ en la pantalla del teléfono.
Abrazos. Besos. Gasolineras