Camino algunas tardes por el río. Cruzamos hacia Sevilla y por "El Capote" descendemos.
Mi hija se entusiasma con el ambiente; los abrazos y los litros sobre el cesped, el bullicio de los sentados y el silencio de los que corren. Mientras caminamos, el sol baja sus dedos por nuestra espalda y a nuestro lado el río se enciende.
A veces hay ocas en nuestra orilla y siempre hay puentes.
Que no nos falten los puentes que nos acerquen a todas las orillas.
Abrazos
Escrito por Trini a las 1 de Mayo 2009 a las 11:27 AM